Título: Mis poderes y tus polvos mágicos
Publicación:  2018, Editorial Esencia
Temática: Romántico-erótica
Páginas: 464
Autora: García de Saura
Puntuación: 6 /10

Sinopsis: Paula, una chica alejada de los cánones de belleza actuales y volcada exclusivamente en alimentar su intelecto, está convencida de que es bruja. Nadie en su pequeño pueblo cree que tenga poderes, hasta que llega la fiesta de fin de curso. Esa noche, tras la última jugarreta de Juanjo, su mayor enemigo, ella lo amenaza delante de todos y le prepara un hechizo con el que logra hacerlo desaparecer.

Reconozco que andaba buscando un ebook en la página de la biblioteca y el título de éste me hizo tantísima gracia que lo quise leer. Hace cuarenta y tantos días que estamos de cuarentena y la verdad, necesitaba reírme, despejarme, y sabía que con este libro lo iba a hacer. No me equivocaba.

Supongo que con el título y el género al que pertenece tenéis suficiente para intuir la trama: chica se enamora de chico, chico se enamora de chica, hay algún problemilla que dificulta la relación y tienen algún que otro encuentro sexual, pasional, excitante. Mi sorpresa no llegó en la trama, que como digo, era previsible, sino en la construcción de los personajes y en la voz de los mismos.

Paula es la protagonista, y al contrario que en la mayoría de las novelas de este tipo, tiene carácter. Es una chica independiente, segura de sí misma, que rechaza los cánones de belleza marcados y que tiene como máxima prioridad cultivar su inteligencia. Juanjo, el chico del que se enamora, no es un ricachón, ni un tipo duro y frío. Es inteligente y tan seguro como ella. Están en todo momento en una situación bastante igualitaria, y digo bastante porque en ocasiones Paula demuestra ser más cabezota e insistente que él en sus propósitos. El resto de personajes, secundarios, no están tan bien definidos como ellos dos, pero son bastante realistas: el hermano de la protagonista es un pica-flor; la cuñada una chica un tanto superficial; sus padres unos currantes, de clase humilde; su amiga Manuela es un poco conservadora y recatada; y Lola, su compañera de piso, es una chica liberal, que disfruta del sexo y de su trabajo, relacionado con el sector de la moda.

Las voces narrativas están muy bien. La historia está explicada a dos voces: la de Paula y la de Juanjo. Sus narraciones tienen personalidad, se diferencian sin problemas. Esta doble perspectiva aporta a la novela un poco más de calidad y evita que sea muy monótona. El vocabulario que utiliza la autora es simple pero eficaz y las explicaciones claras y concisas. El PERO, y con mayúsculas, es el exceso de las conversaciones. Algunos de los diálogos no aportan nada a la historia, podrían elidirse, o mencionarse a través del discurso indirecto. En mi opinión, tanta conversación vacía, entorpece la lectura, pintándola con un tono infantil, tontorrón.

Con respecto a la trama, como decía, es previsible, pero está bien hilada. Da la sensación, por culpa del exceso de conversaciones, que hay conflictos que los alarga demasiado y otros que, sin embargo, parecen cerrarse muy deprisa. Aún así, es una novela entretenida, explicada con humor, fresca, con un punto de crítica social. Por un lado, crítica a la mala fama que tienen las novelas eróticas y hace un guiño a sus cualidades: como visibilizar el placer femenino.  Por otro, hay una fuerte crítica a los personajes femeninos superficiales. Paula es bruja, porque es inteligente, porque está adelantada a su tiempo y es valiente.