Autor: Paco Marco
Comunidad autónoma: Cataluña
Título: Los secretos de Alba
Género: Ficción / Misterio
Año de publicación: 2017
Editorial: Puck
¿Primera publicación?: No
Lengua de redacción: Castellano
Lengua de lectura: Castellano
Nota: 3/10

Los jóvenes pasan su tiempo libre con actividades rápidas. Los juegos de la PlayStation, por ejemplo, parten de premisas sencillas, pero tienen una acción continua, colores estridentes, dibujos, en su mayoría, hiperrealistas. Las redes sociales, lo mismo: imágenes, vídeos cortos, coreografías repetidas una y otra vez. Movimiento y estimulación visual constante. Por eso, intento comprender que la literatura juvenil está tirando por ese camino: por el camino de la simplificación, de lo comprensible, de la rapidez. Lo intento, pero no quiero.

Los secretos de Alba es una novela que parte de una premisa interesante: a Alba le han detectado leucemia y necesita a un familiar para que puedan hacerle una operación de urgencia. El problema es que Alba es adoptada. Sus padres adoptivos no pueden ofrecerle ayuda, pero están dispuestos a pedirla. Contratan a Néstor, un detective privado de gran caché para que busque a la madre biológica de Alba. El hijo de Néstor, Marco, quiere ser detective, de hecho ya ha empezado a hacer sus pinitos y a resolver algunos misterios del instituto. Así que cuando se entera de que su mejor amiga tiene cáncer decide llevar la investigación por su cuenta. Lo que no sabe es que trabajar a espaldas de su padre le puede traer muchos problemas.

Como comentaba, la premisa es interesante, el problema es que la trama se desarrolla muy deprisa y es esta velocidad la que acaba estropeando la novela entera.

Si no hacía algo en dos días mi amiga moriría. Así que tenía claro que no iba a hacer caso a mi padre.

los secretos de alba, paco marco (2017: 37)

La historia se desarrolla en tres días: jueves, viernes y sábado. En primera persona, Marco nos va explicando todas las peripecias que lleva a cabo para salvar a su amiga. Tiene prisa: si no encuentra a su madre biológica morirá en 48h. Y aquí empezamos a levantar la ceja. ¿De verdad una enferma de cáncer terminal se puede curar si en un máximo de 48h encuentran un donante? ¿Es posible que la enferma se mantenga con vida justo ese tiempo? ¿Es esa la precisión médica? La cuestión es que Marco cree que sí, que si tarda 49h, su amiga habrá muerto.

Seguimos con la velocidad. Marco es hacker. Tiene una habilidad especial con los ordenadores y puede entrar en el sistema del Hospital Clínic si le da la real gana. El autor dirige la agencia de detectives Método 3 y está especializado en Derecho Informático. Se nota, habla del tema con propiedad y menciona algunas tecnologías que a mí, como es de esperar, se me escapan. Ahora, bien, un chico de unos trece años, ¿puede entrar en el sistema privado de un hospital entero en menos de una hora? Pues lo hace, como también es capaz de hackear el sistema de su colegio en menos de cinco minutos o entrar en una cuenta de Facebook como quien entra en un bar. Rápido. Rápido.

El conflicto principal es la enfermedad de Alba, pero para conseguir la cura Marco se mete en algunos líos más que se van resolviendo a medida que avanza la trama. Estos problemas aparecen en cuestión de dos párrafos y se ventilan en otros dos. No se desarrollan los espacios, ni los personajes, ni los conflictos. Todo aparece y desaparece en un suspiro. Me da la sensación de que la novela no está narrada, está resumida. Como si el escritor hubiera hecho una escaleta y se hubiera dedicado a enganchar los pedacitos que la componía y ya está.

En general es un libro flojito. Tiene un punto de misterio que se resuelve de manera previsible. Y sobre todo, es rápido. Si lo he repetido tanto en la reseña es porque la sensación que me queda tras la lectura es esa: velocidad. Una carrera para escribir el punto y final.

¿Quién es Paco Marco?